Laurel, más conocido como «El Padrino del Ska», fue un cubano de ascendencia jamaicana que tiene el honor de ser el primer músico en llevar la música de la isla al resto del mundo.

El talento de Laurel Aitken encabezó una nueva ola de transformaciones musicales que cambió la vida de los británicos y de los «West Indians» asentados en una zona denominada Greener pastures.

Nacido en Cuba en 1927, de padre jamaicano y madre cubana, la familia migró a Jamaica en 1938 cuando Aitken contaba con tan sólo 11 años de edad. Creció escuchando canciones de Nat King Cole y el «Boogie-Woogie» de Louis Jordan, antes de participar y ganar el concurso de Vere Johns Opportunity Hour. El joven músico encontró su esencia bailando y cantando en algunos de los clubs de Kingston, además de actuar en varios eventos de Calypso para los turistas de los cruceros en Kingston Harbour. Por cierto, Laurel es el hermano de otro famoso músico, nada más y nada menos que Bobby Aitken.

Con el paso del tiempo, Laurel fue desarrollando una gran habilidad para componer canciones en diversos estilos como el Calypso o Boogie. Entre los años 1958 y 1960, grabó sobre instrumentales de Calypso, «Revival Styles» y Pre Ska para varios productores. Por ejemplo, junto a la banda The Boogie Cats, registraron el «Baba Kill Me Goat», que es uno de los temas de Calypso más famosos de la historia. Durante ese tiempo también grabó algunos éxitos de Rhythm and Blues, como «Low Down Girl» o «More Whisky«.

Las dos últimas canciones grabadas en la década de los cincuenta formaban la cara A y la B de un mismo serato que hizo historia. «Boogie In My Bones» se convirtió en el primer single jamaicano en alcanzar el número uno en Jamaica, mientras que «Little Sheila» fue el primer single jamaicano grabado y distribuido fuera de la isla bajo el sello Island Records, fundado por Chris Blackwell. Precisamente, el Padrino del Ska fue el trampolín de Chris Blackwell como productor musical, quien luego catapultaría al estrellato al mismísimo Bob Marley. Asimismo, «Little Sheila» también llegó a ser número uno durante once semanas.

Con ese trabajo, Laurel Aitken hizo historia en 1959, convirtiéndose en el primer artista jamaicano en aparecer en las listas de música de UK. Más tarde, también lo harían otros jamaicanos como: Byron Lee and The Dragonaires, Owen Gray o Wilfred. Quizá por ese éxito, en el año 1960, Aitken migró a Reino Unido en busca de una mejora en sus condiciones de vida. Con él se llevó sus grandes éxitos de Ska y Boogie grabados en Jamaica que se convirtieron en el principio de una fructífera carrera en UK.

Tras instalarse en 1960 en Reino Unido, en el barrio de Brixton conoció a la comunidad jamaicana que vivía allí, estas experiencias se pueden ver en canciones como «Sixty Days and Sixty Nights». Por todo ello, en Reino Unido es considerado como uno de los mayores representantes de la música jamaicana, donde tiene una legión de seguidores entre los Skinheads y otros fans del Ska.

Con contratos firmados con algunos productores jamaicanos, el sello Melodisc Records permitió la distribución de la música jamaicana en UK. Laurel fue uno de los primeros artistas en beneficiarse de este permiso. Este contrato generó numerosos beneficios al Ska británico y del resto de Europa.

Laurel_AitkenTodo esto ayudó al Ska proveniente de la isla a asentarse en Reino Unido y alcanzar la popularidad que tiene hoy en día. Con el sello Blue Beat, Aitken lanzó el single «Lonesome Lover«, la respuesta fue tan grande que se pidió a gritos al dueño de Melodisc Records, Emile Shait, fundar un sello exclusivo de música jamaicana.

En 1963 volvió a Jamaica durante un tiempo, en el cual grabó algunos tunes para el productor Duke Reid como: «Zion» y «Weary Wanderer«, aunque seguramente, si preguntas a los jamaicanos cuál es su canción favorita de Aitken, la mayoría diría que «You Leave Me Standing» ya que es un R&B que significa mucho para ellos.

A finales de los sesenta volvió a UK, donde se ganó el apodo de «El Padrino del Ska» con sus cerca de 130 canciones. Desde entonces estuvo con varios sellos y amplió su repertorio con Rocksteady y Reggae. Durante la década de los setenta siguió haciendo tours expandiendo la música jamaicana por el Reino Unido. A principios de los ochenta sacó su único hit de Pop «Rudi Got Married» en 1981, luego estuvo tocando con un grupo de Ska Revival hasta que en 1990 decidió retirarse.

El 17 de Julio de 2005, a los 85 años de edad, el artista murió a causa de un infarto en Leicester (Inglaterra) .