Tras haber recorrido los inicios del Dub en la primera parte de esta historia. En el segundo y último capítulo, vamos a seguir analizando lo ocurrido hasta llegar al siglo XXI.

Nos adentramos en la época en la que los avances tecnológicos y la maravillosa mente creativa de los ingenieros de sonido consiguieron que el Dub se confirmase como el género más vanguardista de la isla.

Scientist

Los primeros grandes contratos en la industria del Dub

En los años 70, llegaron los primeros grandes contratos para los ingenieros de sonido de la isla. Por ejemplo, Lee Perry fue fichado por Island Records, el sello de Chris Blackwell; Errol Thompson se fue con Joe Gibbs, quien consiguió un contrato con WEA (Warner, Elektra y Atlantic); o Ernest-Hoo Kim, junto a Sly Dunbar y The Revolutionaries House Band, y sus piezas para Channel One, algunas de las cuales salieron con Virgin.

Sin embargo, durante esa década, los acontecimientos evolutivos más importantes continuaron de la mano de King Tubby, quien contaba con aprendices de la talla de Prince Jammy y Scientist para mezclar auténticas obras maestras, sobre todo con la Roots Radics Band, publicadas con Trojan y Greensleeves. El caso es que Scientist logró «aislar» de tal manera el sonido del bajo que consiguió una importantísima repercusión en el extranjero.

La maduración y la expansión del Dub

El concepto de álbum Dub alcanzó su punto álgido de popularidad en la segunda mitad de los 70 cuando Joe Gibbs y The Professionals publicaron su African Dub Chapter 1 (mezclado por Errol Thompson). Este disco se puso de moda entre los estudiantes de UK y fue en aquel entonces cuando el punk tuvo esa bonita relación con la música popular jamaicana, a manos de personajes como John Lydon, The Clash o Don Letts, dando lugar a formaciones como The Ruts, The Slits, Generation X y Killing Joke.

Ahora si se podía afirmar que el Dub había navegado más allá de los mares de Jamaica. Era la añorada época en la que se podía disfrutar en los sound system de un excelente Lloyd ‘Bullwackie’ Barnes en la ciudad de Nueva York o de Ken ‘Fatman’ Gordon y Jah Shaka en Londres.

Jah Shaka

El Reino Unido

Entonces aparecieron una magnífica serie de registros de Dub en Reino Unido para elevar aún más el espíritu de esta música. Todo ello fue impulsado por el talento de ingenieros como Neil ‘Mad Professor’ Fraser, un inmigrante de la Guyana en UK; Dennis Bovell, el músico y productor nacido en Barbados; o el inglés Adrian Sherwood, quien fundaría su sello On-U Sound poco después de haber trabajado con Prince Far I. Por cierto, una vez nombrado Prince Far I nos vemos obligados a recomendaros su álbum Cry Tough Dub Encounter Chapter 1 de 1978, donde Dennis Bovell y Mark Lusardi fueron los técnicos y Adrian Sherwood se encargó de la mezcla.

Mientras que en Jamaica sonaba el Sleng Teng…

De vuelta a casa, en Jamaica, el Dancehall estuvo reinando la isla desde mitad de los 80. El responsable fue el famoso «Sleng Teng» de Prince Jammy, reconocido como el primer tema electrónico en la música popular jamaicana. Sin embargo, el formato digital no tuvo tanto éxito en sus inicios, al ser menos propicio para las mezclas de Dub que el sonido de los instrumentos en directo capturados por los equipos analógicos.

Pero con una demanda musical tan importante, junto a la reducción de los costes y tamaño de los equipos de grabación, fue algo natural que se expandiera este nuevo sistema por todo el planeta. La verdad que tan sólo era cuestión de tiempo.

King Jammys

El nacimiento del Digital Dub en UK!

Y de vuelta a UK, donde The Disciples, formado por dos hermanos ingleses fanáticos del Dub, Russ D. y Lol Bell-Brown, produjeron un Digital Dub magistral en su pequeña habitación a finales de los 80, tras sentir una fuerte inspiración en los bailes de Jah Shaka. Por otro lado, las propuestas de Alpha and Omega y Bush Chemist nos ofrecieron unas producciones increíbles en la década de los 90. Pero también surgieron otros nombres como Zion Train o Dreadzone, pioneros en explorar un sonido más contundente que pronto tendría su recompensa.

El Dub en otros géneros no jamaicanos

La influencia de esta música continuó cobrando fuerza más allá de la escena, como se puede observar cuando Massive Attack estuvieron bebiendo de la fuente original del estilo dub jamaicano, arropados por el mismísimo Mad Professor en la versión Dub de su álbum Protection a mitad de los 90, que se llamó No Protection. Asimismo, en 1989, los Beastie Boys reflejaron su interés por este género cuando añadieron un sample de Lee Perry en su álbum Paul’s Boutique. Casi 10 después, en el 98, los Beastie Boys llegaron a contar en primera persona con la ayuda de Lee Perry en su disco Hello Nasty, más concretamente en el tema «Dr. Lee, PhD».

Y por último, saltamos de siglo con el prodigioso y masivo «Chase The Devil» de Max Romeo, una producción a cargo del ominipresente Lee Perry, que es otro de los temas que afianzó al Dub a nivel mundial. Eso ocurrió cuando Kanye West muestreó la melodía para Jay Z en su The Black Album de 2003.

Lee Perry