Tras abandonar Black Uhuru, el debut de Junior Reid fue un himno revolucionario llamado «One Blood».
Bien, pues este año celebramos su 30º cumpleaños, ya que la canción fue publicada por primera vez en 1989.
Desde el gueto hasta Black Uhuru
Delroy «Junior» Reid nació en Jamaica un 06 de junio de 1963. El joven Delroy creció en Waterhouse, un lugar famoso por ser uno de los lugares más peligrosos de Jamaica. A mediados de los 70, en una de las épocas más violentas que ha vivido la isla, conoció a Hugh Mundell. Con tan sólo 13 años, grabó con Mundell su primer sencillo, «Speak the Truth», que fue lanzado en Jamaica en el sello Rockers de Augustus Pablo. Poco después, pasó a formar su propia banda, Voice of Progress, con el que tuvo cierto éxito local gracias a su single «Mini-Bus Driver».
Más tarde, a principios de los años 80, registró una serie de canciones para Youth Promotion, por encargo del gran Sugar Minott. Entre ellas, cabría destacar su «Foreign Mind», una declaración que se convirtió en un himno para la juventud de los guetos jamaicanos. Asimismo, Junior Reid llevó su talento al estudio de King Jammy, con quien grabaría «Boom Shacka Lacka». Esta pista fue su primer hit en UK, lo que le ayudó a alcanzar otro nivel.
En 1985, después de una serie de exitosos singles, como «Youthman», «Sufferation», «Give Thanks and Praises» o «Move Higgler», le llegó una inmejorable oportunidad para ampliar su audiencia internacionalmente. Junior Reid se convirtió en el sustituto perfecto de Michael Rose en Black Uhuru, puesto que utilizaba un estilo vocal muy similar al de Mykal. Dos años y dos álbumes después, Reid abandonó la formación. Desde entonces, el artista ha estado más interesado en producir material para sí mismo y mantener su carrera como solista.
Y llegó el «One Blood» de Junior Reid
En 1989, Reid alcanzó el punto más álgido de su carrera cuando se situó a la vanguardia de la escena Reggae. Este paso de gigante fue culpa de su archiconocido «One Blood», un tema que fue publicado en su propio sello J.R. Productions. Este ‘big tune’ se convirtió en un éxito tan masivo que ha perdurado hasta el día de hoy. No ha perdido nada de su poder con el paso de los años. Es más, ha conseguido ser una de las canciones más populares de la música jamaicana en el planeta. Por cierto, JR Productions fue creado en 1984 y también es responsable de otros grandes hitos en la historia musical de la isla. Por ejemplo, allí se sacaron trabajos muy interesantes de algunos de los artistas más legendarios, como Dennis Brown, Gregory Isaacs o Ninja Man, entre muchos otros.
Posteriormente, el single se incluyó en un disco que llevaría el mismo nombre, One Blood. Ese álbum fue publicado en 1990 por Big Life y fue reeditado dos años después. En verdad, si amas la música Reggae, todo este proyecto es de escucha obligada. Veréis, el respaldo musical a la voz de Reid es algo mágico. Lógicamente, Reid se produjo a sí mismo creando una atmósfera casi hipnótica. Por otro lado, hay una diversidad asombrosa en los estilos, desde Reggae o Dancehal hasta R&B o Hip Hop. Sin duda, este trabajo fue un logro impresionante, por lo que obtuvo críticas muy favorables en su momento. En cuanto a los músicos de la grabación, podemos encontrar a Sly & Robbie, Carlton «Santa» Davis, Tony «Asher» Brissett, Chris Meridith, Tyrone Downie, Earl «Chinna» o Dean Fraser.
Un himno mundial que clama por la unidad
Ciertamente, el mensaje universal de «One Blood» es similar al «One Love» de Bob Marley. No obstante, Junior Reid ha sabido difundir su canción y mantenerla como una de las preferidas cuando se habla de unidad. De hecho, el jamaicano ha utilizado muy bien todas sus bazas. Hemos visto como se introdujo en la escena Hip Hop norteamericana con este single, a través de megaestrellas como Wu-Tang Clan o The Game. Igualmente, en noviembre de 2007, Reid tuvo la ocasión de interpretar el remix que había grabado junto a Alicia Keys, llamado «No One», en los prestigiosos American Music Awards.
Por último, se llegó a temer que este himno mundial acabase eclipsando al resto de su trayectoria, como ha ocurrido en las carreras de muchos artistas; pero la calidad artística del jamaicano ha sobrevivido entre las generaciones siguientes. En realidad, se dice que la longevidad de Reid tiene mucho que ver con la atemporalidad del «One Blood».
… modern vampires of the city, hunting blood, blooood, bloooooood!