Hace un par de años, publicábamos un artículo titulado «El Reggae necesita de más profesionales». En realidad, este texto despertó cierta polémica, pero más o menos como cada vez que nos cuestionamos los intereses de las personas que forman la escena de la música jamaicana.
El caso es que vamos a volver a tocar un tema similar, ya que en cierto modo lo único que pretendemos desde DotheReggae es dar voz a las dudas y preguntas de l@s verdader@s amantes de esta cultura.
LPs o singles esporádicos
Uno de los puntos más importantes que tratamos en aquel artículo sobre el Reggae y la profesionalidad es el hecho de que siempre será más motivador el trabajar en EPs o LPs que en singles esporádicos. Pero claro, esto conlleva otro tipo de responsabilidad con los deberes que se han de asumir por ser un artista. Es decir, es necesario implicarse bastante más de lo que están haciendo un gran número de los artistas de hoy en día. Por ello, esperamos que las próximas palabras sirvan para una correcta evolución.
Seguramente que en más de una ocasión habrás escuchado que ahora el público no quiere albums y que lo que prefieren son singles, y a ser posible en formato audiovisual. Nuestra respuesta a esas afirmaciones es que no hay que crear más vaguería sino que hay que ir en la búsqueda de las ilusiones que genera un trabajo consistente y bien estructurado. Es más, por aquí nos gusta hacer comparaciones del tipo: «la música es como una especie de droga adictiva». Precisamente, es por eso que desde hace décadas hay un incremento de productos adulterados que están provocando daños irreparables en la sensibilidad musical de muchos oídos.
Popcaan habla sobre los one riddims
Este mismo debate está de plena actualidad en Jamaica y, por consiguiente, en el resto del planeta Reggae / Dancehall. Al parecer, todo ha comenzado tras una publicación de Popcaan donde se alentaba a los artistas a preocuparse menos por aparecer en los ‘one riddims’ y centrarse más en grabar un buen trabajo. Bien, pues este post ha vuelto a sacar a la luz una triste situación que es muy frecuente en la isla: Los artistas no ven la necesidad de publicar álbumes, ya que se piensa que no son reconocidos por l@s fans. Esto es un error garrafal y se puede identificar claramente con la fama momentánea que están «disfrutando» la mayoría de las propuestas que nos entregan los artistas más jóvenes, a quienes les resulta más fácil lanzar un single que un álbum por conllevar menos esfuerzos.
Menos dedicación y más beneficios
De todos modos, también deberíamos de ser conscientes que la predominancia del single es más fructífera para las personas que dirigen el business que para el desarrollo real del artista, ya que esto significa menos dedicación y más beneficios. Dicho de otra forma, han aparecido muchos artistas que, verdaderamente, son más actores de escenario que músicos y esto está directamente relacionado con el triunfo del show business y el detrimento de la calidad musical en nuestra cultura. No obstante, todos esos artistas, junto a los ejecutivos que les dirigen, se centran en ganar dinero más que en dejar un legado artístico que sea reconocible por las siguiente generaciones.
¿Y si el problema es que no hay suficientes recursos?
Sin embargo, no hay que olvidar que hay muchos artistas que les gustaría poder publicar álbumes pero simplemente no disponen de recursos, lo que les conlleva a ir sacando singles hasta que algún mecenas se fije en ellos. Lógicamente, con esta tendencia actual es muy difícil que eso ocurra puesto que los inversores lo que quieren es dinero y más dinero. Además, los dueños del negocio han conseguido un escenario ideal para que gran parte del público demande exclusivamente música de baja calidad a lo «fast food».
Entonces, visto lo visto, creemos que ha llegado la hora de que el artista sea más fiel a su creatividad y no se deje manipular por los requerimientos del mercado consumista. Asimismo, cuando todas estas personas se empiecen a tomar la música en serio, como un arte y no como un antojo del ego, seguramente se encontrarán con las ganas de hacer un álbum y abandonarán el camino de la conformidad que se ha tomado en los últimos años. Vaya, que hay que intentar por todos los medios que ese comportamiento se modifique cuanto antes, puesto que de no cambiarlo nos conducirá a la extinción artística.