En un movimiento que está destinado a sacudir los cimientos de la escena reggae, Tydal Kamau acaba de publicar un nuevo LP titulado I Become A Man.

Probablemente, uno los lanzamientos más interesantes en lo que llevamos de año.

La consolidación de Tydal Kamau

En realidad, I Become A Man es el testimonio del profundo talento creativo de Tydal Kamau; el cual se manifiesta en diez pistas que exploran una amplia gama de temáticas y melodías. Con este trabajo, el jamaicano nacido como Navardo Graham en St Mary, ha consolidado aún más su posición como uno de los cantantes y compositores más destacados de la escena reggae actual.

Este nuevo registro ha sido fruto de una colaboración con Oneness Records, el sello discográfico con sede en Munich, quienes ya llevan unos años liderando la vanguardia de las producciones musicales de vertiente jamaicana. En I Become A Man, el equipo de Oneness han continuado su experimentación con los ritmos reggae, obteniendo un resultado auténtico y genuino que trasciende las fronteras de lo convencional.

La pista que da nombre al álbum, «I Become A Man», es un viaje de autodescubrimiento y madurez tanto artística como personal. Además, esta canción marca la primera de las tres colaboraciones destacadas del álbum. En esta ocasión, Tydal se une al británico Randy Valentine. Pero eso no es todo; también puedes disfrutar de su poderosa colaboración con Anthony B en «Bad Vibes» y su emocionante encuentro con Turbulence en «Rich Problem», una pista que se aleja audazmente del reggae más tradicional.

Entre las gemas instrumentales proporcionadas por Oneness Records, nos reencontramos con el inconfundible Nice & Easy Riddim en «Paradise Lost» y el vibrante Bambu Riddim en «Don». Estas dos pistas se suman a la variedad musical de un álbum donde cabría destacar otros tracks como «Modern Generation», un corte que ofrece una perspicaz exploración de la vida digital en la sociedad actual; «Love Like This», una pieza romántica perfectamente ejecutada; o «One World», el inspirador himno que abre este significativo proyecto.

Y, como curiosidad, no podemos dejar de mencionar la presencia de Sherieta Lewis en los coros. Algo que añade otro elemento especial a esta trepidante experiencia musical. En resumen, I Become A Man es una obra maestra que merece un lugar destacado en tu colección… sure!