Ciertamente, las comparaciones son odiosas, pero en el caso de las versiones o covers de canciones son casi inevitables.

Digamos que es un tema muy delicado y, especialmente, si son de un artista que es popular o de una canción que fue un éxito.

¿Qué nos aportan las versiones o covers?

Enel mundo del Reggae, el saber cuando una canción es «copia o original» suele tornarse bastante complicado, sobre todo cuando se investiga en el ámbito del foundation; ya que son numerosos los casos en los que pasan muchos años hasta que por fin se da con el «primer registro». Es más, digamos que uno de los mejores momentos para cualquier amante de esta cultura es cuando se descubre una pieza anterior a la que tu creías que era la primera versión… uno de los mejores pasatiempos.

Un punto importante a examinar es que siempre hay que tener en cuenta que hay versiones que son mucho más conocidas que la pieza original. Esto ocurre con mayor frecuencia cuando hay un intercambio con géneros de mayor audiencia, es decir, cuando un intérprete con éxito internacional acude a versionar alguno de los temas del enorme legado de la isla. Por ejemplo, tan sólo hace unas semanas, os hablábamos del 40º aniversario de la internacionalización del Rivers Of Babylon. Como os dijimos, el tema original fue escrito por The Melodians en 1970, pero el éxito mundial llegó casi 10 años después con la versión de Boney M, quien además realizó unas pequeñas modificaciones en la letra de la canción.

Si anteriormente hablábamos de las grabaciones discográficas, no hay que olvidar lo que ocurre en los conciertos. En este campo, las versiones se convierten en un recurso que utilizan casi todos los artistas en sus giras. Probablemente, el más versionado sea Bob Marley, como habréis comprobado en un gran porcentaje de los eventos a los que hayáis acudido. Precisamente, esta situación repetitiva levanta tanto apatías como alegrías entre el público. En realidad, los artistas que recurren al ‘Rey del Reggae’ en sus directos tienen su parte de razón, ya que no hay ningún artista que sea más conocido que él, si hablábamos de Reggae, por lo que la «buena respuesta» está casi garantizada. Sin embargo, para algunas personas con más conciertos a sus espaldas, este hecho plantea dudas sobre cierto aprovechamiento y da señales de vaguería creativa.

Por lo tanto, las versiones pueden tener efectos secundarios no deseados. Por eso mismo, para que un cover aporte más contenido a la historia musical de la humanidad, quizá, debería de reunir ciertos elementos enriquecedores que atrajesen nuestra atención para dejar de verse como una canción de segunda mano. Ahí es donde entra en juego el papel de un buen productor, porque muchas veces el intérprete no puede ver más allá de sus deseos. De hecho, hay versiones que superan con creces a la original en cuanto a calidad. Justamente, eso es lo que debería perseguir el artista a la hora de ejecutar una versión, puesto que es más interesante hablar de cultura que de mero entretenimiento, ¿verdad?