Hay muchas razones por las que he decidido escribir este artículo, así que voy a intentar afinar mis palabras para darle el significado deseado.
Como dijo Bob Marley: «¿Por qué no podemos ser lo que queremos ser? Queremos ser libres».
Las patologías del pensamiento de grupo
La verdad es que para entender el siguiente artículo es muy importante tener en mente las patologías del pensamiento de grupo. ¿Os habéis preguntado por qué tantas personas hablan sobre una serie de principios razonables pero se desdicen a la mínima de cambio? Es algo así como que tenemos ideales de «quita y pon». Pero si no pensamos en lo anterior como un ataque personal, entonces se podría afirmar que los filósofos comienzan a distanciarse de sus filosofías en el momento en que entra en acción su subconsciente.
Un efecto derivado de este estado es intentar parar cualquier voz discrepante convirtiéndola en un enemigo y, claro, aquí tenemos un problema cuando esto ocurre entre las gentes del Reggae, ya que entonces se desdibujan las bases de la unidad y el respeto que se supone que abanderan este movimiento. La consecuencia es que muchas personas afines a esta cultura ven como pierde credibilidad el mensaje de esta música encendiéndose una alarma en su cabeza, pero hay que entender que «las personas son personas» y no por ello hay que tirar por tierra el trabajo de todos esos grandísimos mensajeros que han escrito la historia de la música Reggae.
Es más, hay que evitar el convertirse en una persona paranoica cuando se descubren todas esas críticas personales que se realizan entre los distintos «enemigos musicales» del planeta Reggae, ya que en el trascurso de sus batallas dialécticas llegan a torpedear su equilibrio emocional activándose un modus operandi «a la defensiva» que es muy dañino. Vamos, que como decía antes «las personas son personas».
Las críticas en la escena Reggae
Pero vamos a seguir enfrentándonos a este hecho sin rodeos. ¿Por qué no se saben aceptar las críticas? Es como si se nos hubiese olvidado debatir y, probablemente por esta razón, estemos alejándonos de querer hacer las cosas mejor al desechar los elementos inspiradores que se pueden dar en un correcto intercambio de pareceres. No hay que permitir a nuestra cabecita el creer que todo son desacreditaciones, ya que si fuese así habría que examinar que tipo de comportamiento se está adueñando de nuestro día a día. De hecho, el aceptar las críticas es una cuestión de autoconfianza e incluso de madurez.
La sabiduría de nuestros antepasados nos ha dejado unos cuantos detalles que me gustaría volver a explorar en busca de un progreso de la escena Reggae actual, como por ejemplo que «el escuchar al peor de nuestros enemigos puede en realidad despertar una ventaja desconocida» o «la diversidad de opiniones enriquece al conjunto de las personas».
A ver, llegados a este punto habría que observar que hay dos categorías dentro de las críticas: constructiva y destructiva.
Tipos de críticas: Constructiva y Destructiva
La crítica constructiva se hace a menudo con preocupación. Digamos que en la crítica constructiva va implícito el deseo de ver las cosas de una mejor manera y en última instancia siempre hay buena voluntad. De acuerdo en que a nadie le gusta ser criticado, es algo humano; pero cuando se sufre una critica donde el ego se siente incomodo o lastimado lo que ocurre en realidad es que se nos está tendiendo una mano para ayudarnos en este viaje llamado vida.
En cuanto a la crítica destructiva, puede esconderse debajo del altruismo o un comentario justo, pero el motivo es difícil de disimular. Es evidente que algunas personas se olvidan de los principios básicos y pretenden destruir a los que piensan que son sus contrincantes. La verdad es que seguro que en otros muchos campos ya habrás visto como algunos «líderes» sufren el envenenamiento por el ansia de incrementar sus ganancias.
En definitiva, tanto la crítica constructiva como la destructiva tienen su valor, ya que la crítica representa una corriente de opinión, sin importar el grado de acidez. Se podría decir que mi camiseta está sucia por querer burlarse de mí, pero lo que si es cierto es que tendría que pasar por alto el motivo y cambiarme la camiseta.
Un mundo más empático
También habría que observar todo esto como el resultado de la guerra moderna que mantiene el sistema contra el pueblo, ya sabéis, con armas tan inteligentes como las redes sociales que de alguna forma pretenden hacer desaparecer las raíces de toda voz que ponga en duda su autoridad y, a su vez, crear enfrentamientos entre las distintas facciones que ponen en entredicho su tácticas.
Esta cultura musical que nos reúne surgió a partir de unas letras que hablaban de espiritualidad y la relación entre el amo y el esclavo, por ello se canta sin miedo sobre la verdadera libertad y el sufrimiento real de las personas. Además, se hace desde un punto de vista políticamente comprometido, por lo que se sufre de una potente censura y, como señalaba anteriormente, también de un inmenso boicot a través de las distintas herramientas del sistema.
Por último, volvemos a insistir en que, ahora más que nunca, necesitamos una nueva perspectiva para seguir avanzando y su visibilidad nos llegará desde otro tipo de conversación que hasta ahora se ha ignorado. Entonces, ¿tendremos alguna vez el apoyo de la escena para que nuestros esfuerzos creen un mundo más empático?.
